#Obedecer a Dios antes que a los hombre

Pues vivimos unos tiempos en los que nos vamos a encontrar a menudo con esta tesitura, porque obedecer a los hombres significa, a veces, ir en contra de lo que trae el Reino de Dios a la Tierra.

Por lo de pronto, obedecer ya no nos resulta fácil. Es un verbo obsoleto, de cuando se maltrataba a los niños en la escuelas y las mujeres no movían un dedo sin que lo supieran sus maridos. Es un verbo marcial. Cualquier día lo quitamos del diccionario por atentar contra las libertades adquiridas con tanto sufrimiento. Lo curioso es que yo a mis hijos les pido que me obedezcan unas cuantas veces y yo obedezco también a mis superiores, por ejemplo.

Si me apuráis nos gusta obedecer al mundo, incluso, y nos plegamos a lo que nos imponen culturalmente, estéticamente, económicamente, socialmente… pero a Dios se lo cuestionamos todo.

Señor, dame valor para no abandonarte nunca, para seguir tus pasos y para obedecer tu Palabra.

Un abrazo fraterno – @scasanovam

No soy yo el que sabe #eselEspíritu

¿Cómo ser testigo? ¿Cómo predicar el Evangelio? Lo cierto es que Pablo me ha hecho pensar hoy con su carta a los Corintios. Miedo, debilidad y… Espíritu. Curioso, sin duda. Hoy podríamos tacharlo de poco preparado, de imprudente, de iluminado… No sé…

Demasiadas veces pensamos que esto de ser evangelizador es algo «profesional» y está claro que la voluntad sola no sirve. Pero esta «profesionalidad» muchas veces ahoga lo más importante: el Espíritu. Cuando acabo por creerme que YO soy el que habla, que YO soy el que transforma, que YO soy el que convence, que YO soy el que sabe; acabo por olvidar que es ÉL el que lo hace todo.

Gracias Pablo.

Un abrazo fraterno – @scasanovam

Palabra y señales #cooperando

Los apóstoles salen por toda el mundo con la palabra y Jesús coopera con las señales. Evangelización en equipo.

Parece algo muy obvio pero a veces nos olvidamos de alguna de las dos partes de la ecuación: o bien esperamos las señales de Dios sin poner de nuestra parte, o bien pensamos que todo depende de nuestra acción pastoral y evangelizadora y olvidamos que Dios también actúa.

Así que ya sabemos.

Un abrazo fraterno – @scasanovam

Nacer de nuevo #elEspíritusopla

¿Nacer de nuevo? ¿De agua y de Espíritu? El Bautismo, dirán muchos. Y posiblemente sea así. Con el Baustismo, nacemos de nuevo y nacemos a Cristo. Pero ¿no es verdad que esto no se ha acabado aquí?

Nacer de nuevo es una actitud también ante la vida, y no sólo ante la vida de fe. Nacer de nuevo es estar dispuesto a volverse pequeño, a replegarse, a empequeñecer, a redescubrirse, a dejarse alimentar, a ser llevado en el vientre materno para luego volver a ver la luz. Nacer de nuevo es creer que siempre hay oportunidad y un cielo que nos espera, es estar dispuesto a volver a aprender a caminar y a hablar y a comer y a escuchar.

Jesús sabe que la fe nunca se para, que el cristiano no se debe acomodar y que el camino que transita, o es camino de vida o no conduce a Él.

Un abrazo fraterno – @scasanovam

Alegría y gozo #EsPascua

Hoy he llegado al colegio con un objetivo claro: transmitir la alegría de la Pascua. Nos encanta celebrar la cruz, el sufrimiento, el dolor, el sacrificio de Cristo de los días previos. Sacamos a los crucificados en procesión, a las dolorosas, a las Piedad, a los EcceHomo… y parece que llega el domingo y ya no hay nada que celebrar.

Todo es nuevo. Todo cambia. La luz se opone con fuerza a la oscuridad. La confianza gana terreno al miedo. El blanco desplaza a lo negro. La alegría se impone ante la tristeza.

Jesús ha resucitado y la alegría que esto supone debe tocar lo más profundo de nuestras entrañas. Si lo hace, si proclamo con fe que Cristo vive a mi lado, en mí, todo será diferente.

Un abrazo fraterno – @scasanovam