Entradas

Nosotros somos colaboradores… y vosotros campo (1Co 3, 1-9)

Entiendo lo que pretende expresar Pablo con sus palabras pero no me gusta la manera o, tal vez, no la entienda. Empeñarse en hacer bandos es algo que no me gusta: colaboradores de Dios – campo de Dios, creyentes – no creyentes… buenos – malos. Al menos a mi es a lo que me lleva.

Por supuesto que yo siento que soy colaborador de Dios y por supuesto que descubro que hay mucho campo que cuidar. Pero también soy campo que otros cuidan. E incluso aquellos que son campo a mi cuidado son o pueden ser colaboradores de Dios en aspectos totalmente desconocidos a mi persona.

Yo prefiero no hacer equipos…

Un abrazo fraterno

Nosotros somos de Dios (1Jn 3,22 – 4,6)

bueno-o-malo.jpgAunque la contraposición «del mundo – de Dios» puede que tuviera mucho sentido en la época en la que fue escrita la carta de Juan, es un lenguaje que creo y compruebo día a día que no está superado por algunos. Ese discurso de «buenos» y «malos», de «injustos» y «justos», de algunos que apuestan por la verdad y de otros que se dejan llevar por sus apetencias… me parece falto de realidad, alejado de Dios…

Yo soy católico, cristiano, hijo de Dios. Intento formarme y crecer en mi fe y como persona. Creo que tengo una misión en el mundo y que Dios me sueña para algo y para alguien. Pero aunque me considero de «los de Dios» también soy de «los del mundo». Es más, no entiendo ser de Dios sin ser del mundo. Vivir en una sociedad concreta, conocer su problemática y vivir con sus dificultades y sus facilidades. Acercarme a todos, escuchar a todos, buscar la verdad de todos y en todo. Amar el mundo en el que vivo, sufrirlo y disfrutarlo. No sé…

¿No fueron en su momento «los de Dios» los que le recriminaban a Jesús estar con «los del mundo»?

Un abrazo fraterno