Entradas

Ley vs. Voluntad (Hebreos 10, 1-10)

Que Jesús vino a trascender la Ley y darle una nueva dimensión es algo que, a estas alturas, cuesta comprender que no todos lo tengamos claro. Sigo oyendo amenazas, incluso con niños, que presentan a un Dios castigador e inmisericorde con aquellos que han violado no sé cuántos artículos de la Ley. Fuera circunstancia, fuera contextos, fuera encuentro personal de esos que le gustaban a Jesús… Ley, ley, ley, ley… y jueces, muchos jueces…

No nos acabamos de enterar, tal vez es que no nos interese, que lo que nos pide Jesús es hacer su voluntad en nuestras vidas, día a día. Menos ley y más amor, menos ley y más ponerse delante del Padre y decirle «aquí estoy, haz conmigo lo que quieras».

Como eso nos da vértigo preferimos ser unos perfectos cumplidores de normas…

Un abrazo fraterno

Voluntad de Dios

La gente sencilla (Mt 11, 25-27)

Podía haber utilizado «pobre», o «miserable», o «desgraciada», o «turbada» o «enferma» pero utilizó SENCILLA. Nuestro diccionario dice que la palabra «sencilla» significa, entre otras cosas: sin doblez ni engaño, que no tiene artificio ni composición, que carece de ostentación y adornos, ingenua en el trato…

A veces nos preguntamos por qué es tan difícil conocer la voluntad de Dios y puede que la respuesta esté en esta Palabra de hoy. ¿Soy sencillo? No lo creo. A veces soy demasiado complicado hasta para Dios. El problema está en mi, no en Él. Estamos en sintonías diferentes y no acabo de escuchar con claridad. Es tiempo de purificarse…

Un abrazo fraterno

No os engañéis (St 1, 12-18)

La vivencia comunitaria sigue siendo de lo más sorprendente. La reunión de ayer fue genial. Reunión EMOCIONANTE. Y nunca mejor dicho.

Y la Palabra de hoy ilustra lo que ayer vivimos: el esfuerzo personal y comunitario por vivir cada día menos engañados. El engaño no es de Dios. Dios es verdad. Y a eso tenemos que aspirar.

Un abrazo fraterno