Del libro de Ageo…

18 Reflexionen desde hoy en adelante, desde el día veinticuatro del noveno mes en que se pusieron los cimientos del Templo del Señor. Reflexionen:

19 ¿Queda aún semilla en el granero? ¿todavía no han dado nada la vid, la higuera, el granado y el olivo? A partir de este día, yo daré mi bendición.

20 La palabra del Señor llegó por segunda vez a Ageo, el día veinticuatro del mismo mes, en estos términos:

21 Habla a Zorobabel, gobernador de Judá, y dile: Yo haré estremecer el cielo y la tierra,

22 derribaré el trono de los reinos y destruiré el poder de los reinos de las naciones; derribaré los carros y sus conductores, los caballos y sus jinetes caerán abatidos, cada uno bajo la espada de su hermano.

23 Aquel día –oráculo del Señor de los ejércitos– yo te tomaré a ti, Zorobabel, hijo de Sealtiel, mi servidor –oráculo del Señor– y haré de ti un anillo para sellar, porque yo te he elegido –oráculo del Señor de los ejércitos

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *