El Señor es mi luz, aunque a veces encienda linternas (Sal 26)
Al final todo va de querer, de amar. Pero se necesita mucha luz para distinguir el buen amor. Esa luz sólo la da Dios. El Señor es mi luz, aunque a veces me empeñe en encender linternas de tiendas de «todo a 100». Se necesita mucha luz para querer a los que uno tiene cerca, […]