Hablar con libertad #yoquiero

Es precioso leer en el pasaje de Hechos de hoy, como Pablo hablaba con libertad del Reino de Dios en la sinagoga. Precioso en lo que respecta a Pablo y a su libertad de hablar, y precioso en lo que respecta a aquellos judíos y a su libertad de escuchar.

Hay gente que cierra puertas y ventanas, oídos, sentidos y lo que haga falta con tal de que nadie le hable de Dios o de la Iglesia. Creo, sencillamente, que están presos de sus prejuicios y de sus miedos. Alguien libre, escucha.

Ojalá yo sea también libre para hablar y para escuchar, para dar y para recibir. Las dos cosas son necesarias en el Reino.

Un abrazo fraterno – @scasanovam

No temas, sigue hablando… #nocalles

«No temas, sigue hablando y no te calles, pues yo estoy contigo»

Eso le dijo el Señor a Pablo cuando las cosas no iban bien en Corinto. Y eso me dice a mí hoy. Santi, no temas, sigue hablando, no calles, yo estoy contigo.

El Reino no es compatible con cualquier tipo de relaciones humanas. Hay que apostar por otra manera. Y hay que decirlo y afrontarlo. Y ponerse del lado de las víctimas en todos los ámbitos de la vida, de los dolientes, de los excluidos.

Santi… no calles… Tomo nota, Señor…

Un abrazo fraterno – @scasanovam

Predicar en un mundo hostil #nocambia

No es un mundo tan distinto al actual el que nos presenta la lectura de Hechos de hoy. Judíos expulsados de Roma sólo por ser judíos y discusiones religiosas que enfrentan y que unen a las personas.

El Reino está entre nosotros pero nunca ha sido fácil predicarlo ni hacerlo crecer. Intereses personales, luchas de poder e influencia, miedos, prejuicios… Ser comunicador del Evangelio en los tiempos que corren se asemeja mucho a serlo en aquellos primeros años tras la muerte y resurrección del Señor.

Estar atentos al Espíritu y orar mucho, poniendo la confianza en el Señor, marca la diferencia. Ser menos yo y dejarle a Él ser más Él…

Un abrazo fraterno – @scasanovam

Veo que sois extremadamente religiosos #Pablo

Pablo supo ver, supo mirar, supo conocer a aquellos a quienes tenía delante. Supo ver lo bueno de ellos, y supo también descubrir su sed, su hambre, sus anhelos. Y ahí, a su manera, les habló de Jesús.

¿Cómo hacemos nosotros esto? ¿No es verdad que a veces vamos con la Biblia por delante sin pararnos a contemplar a aquellos que son destinatarios de nuestra Buena Noticia? Porque se trata de que ellos la acojan, de que ellos la entiendan, de que ellos la quieran… ¿O no se trata de eso?

El mensaje no cambia, claro que no. Dios no cambia. Sin duda. Pero Jesús fue el que nos enseñó a acercarnos a cada uno y a propiciar la experiencia de Dios de maneras distintas con cada uno. Que el Espíritu nos ilumine…

Un abrazo fraterno – @scasanovam

El Espíritu olvidado #Paráclito

Ya no tenemos a Jesús. Igual alguno no se ha dado cuenta todavía. Nos encantaría, pero no es así. Tenemos al Espíritu, que no se ve, que no se toca, que no se oye… ¿Qué hace pues? Pues lo que le hizo a Lidia en la primera lectura de hoy: abrir el corazón.

Yo sólo tengo que dejarme, estar en sintonía, prepararme para que el Espíritu haga su trabajo: disponer mi corazón para que el Espíritu lo abra de par en par. Sin el corazón abierto, es difícil acoger al Cristo, al Reino de Dios. Sin el corazón abierto, el Padre no encuentra lugar para entrar en nuestra vida.

Espíritu del Señor, abre nuestro corazón.

Un abrazo fraterno – @scasanovam

La Iglesia de los puros #tentación

Tantos años han pasado… pero las grandes tentaciones siguen estando presentes en la Iglesia. Una de ellas, una de las más poderosas, es la de creernos los puros, los escogidos, los «de Dios»… y mirar alrededor como si el resto fuera una pandilla de perdidos pecadores camino del infierno más absoluto.

Es también la tentación de aquellos que dentro de la Iglesia se consideran más puros que otros, de los garantes de la doctrina, de los guardaespaldas de la Verdad; frente a los que experimentan el camino de salvación, a Jesucristo, de manera distinta.

Es, en definitiva, mi tentación, la de creerme mejor que otros, más merecedor que otros. Cuando caigo en ella… estoy a años luz del Evangelio.

Un abrazo fraterno – @scasanovam

Profetas y maestros #diversidad

Una comunidad con profetas y maestros… Qué bonito escuchar que el Espíritu reparte dones y que no todos tenemos que ser todo, que no todos tenemos que hacer todo, que no a todos se nos pide lo mismo…

Sí, necesitamos maestros. Gente preparada, formada y con capacidad de enseñar al resto. Y sí, necesitamos profetas; gente que denuncie, que grite, que proteja, que cuide, que cure, que acompañe…

Cada uno tenemos una misión y conocerla es importante, porque lo que dejemos por hacer, quedará inacabado.

Un abrazo fraterno – @scasanovam

¿Cómo voy a entender? #guía

Preciosa la primera lectura de hoy, el pasaje de Felipe y el eunuco del libro de los Hechos. Éste último me recuerdo a tanta gente que estudia la Biblia, lee documentos de la Iglesia, intenta tener fe y creer pero no entiende nada, no lo consigue.

El entendimiento es un don, la fe también. No se consigue a base de estudio, de voluntad, de formación; aún siendo todo esto muy importante. Se necesita al Espíritu que da vida a lo que uno lee, a lo que uno estudia, a lo que uno accede, a lo que uno quiere creer. Y muchas veces esa voz del Espíritu viene mediada a través de otras personas, de nuestros pastores, obispos, sacerdotes, catequistas, profesores, personas concretas que nos dan luz sobre nuestras oscuras lagunas.

Gracias días por las personas que han sido guía para mí. Ayúdame a ser guía para otros.

Un abrazo fraterno – @scasanovam

Los gentiles de S. Valentín (Hc 13,46-9)

Pablo y Bernabé deciden dedicarse a los gentiles. Porque la Palabra, el Reino, el Don… no puede ser impuesto y porque esto de evangelizar no trata de convencer, ni de rebajar, ni de claudicar… Se trata de anunciar a Jesucristo, de ofrecerlo. Y el de enfrente puede cogerlo o no. El respeto a la libertad del otro debe ser máxima.

A veces, cuánto más pensamos conocer a Dios y a sus designios, más lejos estamos de Él y más cerrado está nuestro corazón a la novedad constante y contagiosa del Evangelio, de la nueva Ley del Amor. ¿Qué harían hoy Pablo y Bernabé con nosotros, con los hombres y mujeres de la Iglesia de hoy? ¿Nos abandonarían como a aquellos judíos ante la cerrazón de nuestra mente y nuestro corazón? ¿Qué harían conmigo, con mi soberbia, con mi terquedad, con mi sequedad?

Hoy es S. Valentín y sí, se nos examina del Amor. Pero no de un amor de cena y copa, sino de un amor de banquete inagotable.

Un abrazo fraterno – @scasanovam

¿Qué pasa si me muero mañana? #buenapregunta

Yo no me quiero morir con la sensación de haber sido infiel a la llamada de Dios, de haber incumplido el sueño de Él para mí, de haber tirado mi vida en pos de cosas sin importancia, de haber dejado de hacer tanto…

Yo pienso esto todos los días. Pienso en cuando me vaya. Puede ser mañana. Puede ser dentro de 50 años. El caso es que, igual que Pablo o Jesús, quiero irme diciéndole a Dios: «Señor, lo he dado todo. No me he guardado nada. Lo he intentado. Sé misericordioso conmigo. Quiero estar a tu lado el resto de eternidad«. Yo quiero eso.

El día de hoy no ha sido bueno. No me gusta mi trabajo. Lo tolero pero convivo con esa sensación de que no puedo estar mucho más tiempo dedicando tanto a algo que no me llena, que no responde a lo que Dios me pide y que no saca de mí los dones que Dios me ha dado. Por ahora no queda otra, pero hoy ha sido muy difícil. Me siento muy cansado en este punto. ¿Debería ser valiente? ¿Debo ser prudente? ¿Quiere Dios que mueva ficha? ¿Quién lo sabe?

Me agarro a la cruz, resisto, rezo y confío en la jugada que tengo en mi mano. Amén.

Un abrazo fraterno

Oración en el huerto de Getsemaní